El problema es saber parar a tiempo. Cuando no sabes parar
insultas a tus amigos, peleas con tus enemigos y bailas con la muerte.
La muerte que te acompaña de copiloto cada vez que vuelves a
casa conduciendo borracho.
Cada mañana, mientras echas el hígado por la boca, te
arrepientes de lo que has hecho.
Medita esta noche cuando salgamos de marcha.
¿Para qué te sirvió perder el control?
Ian Domínguez
este relato tendría que es un gran ejemplo de las personas que no saben controlarse y a menudo hacen daño a otras personas como sus familias amigos o a si mismo y por eso deberían de temer mas control
ResponderEliminarEste microrrelato es muy bueno para que millones de personas que suelen hacer esto se lo apliquen. Todos aquellos que salen y no saben controlarse a la hora de beber debería de hacerlo porque a la larga eso trae consecuencias, y no por beber mas o emborracharte antes eres mejor, sino todo lo contrario. Y a la mañana siguiente puedes arrepentirte de todo lo que has echo esa noche, y puede que ya sea demasiado tarde, por que no por mucho que te arrepientas las cosas van a cambiar, entonces es mejor prevenir esta situación.
ResponderEliminarNos enseña que el mismo esta haciendo daño a su vida y su familias personas como él lo sabe que alguien día va morir por su alchol en accidente cuando estará borracho
ResponderEliminarMiles de personas todos los sabados salen de fiesta y pierden el control se beben uno detras de otro . Pero una vez que esto se vuelve una rutina , ya cada vez que salen tienen que beber y cada vez mas . Gran microrelato.
ResponderEliminarZahira Habas