Sensaciones, eso era lo que me producía el alcohol. Sensaciones distintas.
¿Algo bueno? No lo sé, pero eran adictivas.
El problema viene cuando esas sensaciones dejan de ser tuyas para tú a pasar a formar parte de esas sensaciones.
Sensaciones, que terminaron siendo dueñas de mi libertad.
Sensaciones, que terminaron siendo dueñas de mi vida.
Esteban Gómez
No hay comentarios:
Publicar un comentario